lunes, 18 de mayo de 2009

Los árboles mueren de pie

El viejo árbol ha cerrado sus cansados pliegues,

Estira sus brazos en cruz y se prepara a morir

En medio de la oscuridad estalla el lumen de su sonrisa.

sábado, 16 de mayo de 2009

Trifoliar


Ces nymphes, je les veux perpétuer.
Si clair,
Leur incarnat léger, qu'il voltige dans l'air
Assoupi de sommeils touffus.
Aimai-je un rêve?
Mon doute, amas de nuit ancienne, s'achève
En maint rameau subtil, qui, demeuré les vrais
Bois même, prouve, hélas! que bien seul je m'offrais
Pour triomphe la faute idéale de roses.
"L'après-midi d'un faune", Stéphane Mallarmé




Tres poemas hernadianos:

CUARTETO OPUS 131

A través de la soledad de los tejados,
Como frutos malvados de la noche
Los últimos cuartetos de Beethoven:
Igual los ha de oir
Quien en deseo vaga
O aquel que solitario yace
Junto a la mujer
Con quien ya jamás ha de soñar.

Gato, mi querido y sordo gato,
Yo sé que a través de tus patas,
A través de tu aciaga cabellera
Y la noche que me envuelve,
Hemos vuelto a beber,
Hemos llegado
A tener un lugar bajo los cielos.

CANTO CUARTO

Reposando en el cuenco de la luna
Y con los ojos tan lejos
Que se diría
hierba de los lagos;
Y sobre ti, nieve dulce que los años pacen:
El terror de este canto
O su ternura oculta entre el follaje
Como la boca de un venado.
Sobre ánforas muertas y sepultos espinos,
La rama del corazón es posible
Y se alza y te toca, impalpable caricia
A través de tu pecho desleído.
Y luego el viaje en tren
Y aquella dama lánguida
Sonriendo veloz a telégrafos y búhos:
'Dennis, Dennis, tú no estás,
Pero las yeguas paren.'

La espina del Sol, 
Desde el reloj de piedra, 
No los ojos primeros tasajea 
Sino cegadas máscaras, memoria 
De lo no vivido, fruto insomne 
Que antecede a la semilla.


ODA A LA ALEGRIA/AU DIE FREUDE

El cielo tiene varios
Momentos
El momento azul
Cuando no hay
Ni una nube
Y los cuerpos
Bajo el sol
Corren
Se secan
Compran bebidas
Dulces
Como el océano
A través de las cuales
Puedes ver
Un mundo rojo whisky
Sobre las rocas
O cerveza helada S/.15
O algún licor
 
Que se recuerda
Lejanamente
Bajo un farol
Yuyos anémonas
Hidras asfódelos
Y risas arena
Esparcida
Sobre la playa
Es un horizonte sereno.






Luis Hernández un poco más de veinte años ha,  era tan solo el librito escondido que iba a rondar casi todos los días en la vieja librería Horizonte en los portales de la Plaza San Martín.  Su valor superaba mis magros ingresos, pero un día animado por el amable vendedor, decidí comprar y quedarme sin siquiera el pasaje de regreso a casa...Pocos conocían a Luchito, solo unos cuantos connaisseurs, rendian secreto culto a su lírica poética...Hoy en día, como escribí en algun otro lugar, todos son sus amigos, y hasta quienes hicieron escarnio de sus males, ahora fungen de exegétas, haciendo fortuna y fama con su dolor convertido en poesía.  Felizmente, son muchos más los que redescubren cada día que la prístina sencillez de su voz poética oculta, bajo la línea de flotación, el iceberg creciente de un discurso cultural y literario incomensurable. Tal vez dentro de poco sean legiones, y entre ellos los más jóvenes, quienes abracen sus poemas como se abraza una muchacha ( alguna vez recopilados los cuadernos que aún se encuentran perdidos), y henchidos los corazones repitan sus versos, silbando despreocupados "L'après-midi d'un faune" de Debussy, y pensando el próximo bar y la siguiente cerveza... (Elepé)

lunes, 11 de mayo de 2009

LOS MALOS POEMAS



No los destruyas.
No los eches
al pozo de los cielos.

Tal vez ellos retornen
después que la belleza
se haya ido.

Cuando la soledad
camine libremente
de la cama hasta el patio
y mi casa parezca
-al ojo del infante-
algún enorme erizo.


Entonces,
quizás entre sus líneas
descubras un instante inadvertido;
la palabra extraviada
en domingos zoológicos;
algo más verdadero que lo hermoso.

Nadie sabe.
Consérvalos.
Cambia tu piel. También
la piel del mundo.
pero el poema queda
guardando su misterio.

Tal vez no hay en tu cuerpo
-todavía-
esa única lámpara
con la que puedes ver.
Juan Gonzalo Rose

domingo, 10 de mayo de 2009

¿Qué hace posible la Poesía?





La poesía sólo tiene sentido cuando nos demuestra que aquello que dice a través de la magia de las palabras, existe.

Cuando es capaz de evocarnos con musical belleza, aquello que solo vive en los sueños, desde los sentimientos más pristinos hasta los más inconfesables.

La poesía es perfecta cuando llega a las manos de quien es capaz de tener la misma sensibilidad de quien lo escribe, cuando comparte confidencias, cuando enciende pasiones, o la serena voluptuosidad del silencio.

La poesía es mar y firmamento, cumbre y abismo (El mismo horizonte de la aurora es el horizonte del crepúsculo, nos decía Luchito Hernández).

La poesía recoge las más intrincadas motivaciones de la vida humana, pero es también puente a la cavilación más honda y trascendente. Poesía es obra de dioses y de comunes mortales que se hacen de la palabra.

La poesía es oficio y modo de vida. Es abandono y entrega total.

La poesía es cielo e infierno, lo mismo puede ser heraldo de la mayor felicidad o emisario temido del adiós.

Poesía es la música de la celeste esfera y simple canción. Es vox horrísona y geometría perfecta, con razón nos decía el poeta Juan Gonzalo Rose:

El círculo
es el poema perfecto,
La mitad de quien lo escribe,
La mitad de quien lo siente.


Elepé

viernes, 8 de mayo de 2009

Aspergio







Eres
Tal sólo
El rocío,
De vida,
Apenas la filigrana que deja un beso
Sobre unos labios ávidos de amor.

Por qué tuvo que suceder
Por qué la tibieza de tu regazo
Por qué la sonrisa que me regalas
Por qué el diamante de tu mirada
Por qué el rocío que llevas como extraña pendiente
Que toca la puerta del verano.
.
Pues el rocío de tus ojos
Es la pequeña lluvia que inunda
Mi corazón

Y el rocío de tu tristeza me alcanza
Como un abrazo al partir