Como vivo
Con un corazón prestado
He de partir a un lugar
Donde no me alcance la noche,
Allí donde no se ponga el sol.
Secarán mis lágrimas las arenas brillantes de un
Cielo imposible,
Escanciaran mi pena las salpicaduras salinas de las olas,
Y serán mi pañuelo,
Las alas quebradas de gaviotas
Que no querrán decir mi destino,
Por ser cómplices de mí derrota.
Fui campeón de todo,
Viví tan rápido que casi no me di cuenta,
Son testigos de mi paso firme y fugaz
Las estrellas vespertinas
O el sol de Andrómeda,
Que derritió mis brazos de cera y plumas,
Dame viento sosiego,
Desaten los cuatro elementos
Lluvia, oculta mi tristeza,
Derriben las saetas del invierno
Este pecho que ofrezco desnudo y digno,
Y digan acaso,
Que no supe guerrear
Por un amor.