jueves, 1 de enero de 2009

BAJO UNA FRIA LOSA DEL PÉRE-LACHAISE



Soy uno de los que nunca visitó tú concurrida tumba
Bajo una fría losa del Pére-Lachaise,
Allí donde estas desde hace casi cuarenta años,
Sentado, barbado y borr
acho,
Mirando danzar a Isadora,
Y una pléyade de inconformes como tú.

Allí han pasado más años
De que los que viviste
Y apenas hay lugar para las flores
Y versiones de tu vida,
Que todos creen conocer,
Biógrafos que dijeron haberte entrevistado (en secreto),
Poseedores de poemas inéditos,
Cientos de discos de acetato,
Una colección de manuscritos de canciones nunca interpretadas ,
Y hasta una ropa interior hecha piltrafa.

Qué más han de decir de ti,
Pequeño Jim,
Qué más han de inventar,
Para tener más cosas que vender,
A costa de tu historia,
Qué puede hacer la pobre Pam,
Para defenderte,
(Embriagada y con el buche lleno,
Ahora está
Tan muerta como tú),
Y ya no puede espantar las bandadas de cuervos que quieren seguirse cebando de tu cuerpo dislocado y sangriento,
Clavado en la cruz de ese gólgota blasfemo
llamado fama.

He visto tantas veces la película del bueno de Stone,
Los vídeos de Ray, ese mercader tan amable y racional, que dijo ser tu amigo,
He libado en tu nombre
Litros de bourbons y apenas unas cervezas,
y aplasto la colilla de mi último cigarrillo como una cucaracha de fuego,
Al terminar este poema tan desordenado y extremo
Como tu vida.

elepé